Las cosas nuevas suelen ser más atractivas que las que llevamos usando un tiempo; nos cansamos de usar las que tenemos y buscamos sustituirlas por otras nuevas.
Esto que hacemos con las cosas, podemos hacerlo también con las personas: nos cansamos de nuestros amigos/as de toda la vida y prestamos más atención a las nuevas amistades, llegando a despreciar a las antiguas. Sin embargo, las personas no son como las cosas, las personas merecen fidelidad y una relación sincera y duradera.
Los alumnos/as de 6º tenemos clara la importancia de cultivar la amistad y, por eso, hemos querido plasmarlo en esta dinámica. Hemos dibujado un árbol y escrito un consejo para hacer crecer la amistad en cada hoja mientras reflexionamos la lectura de la siguiente cita:

“Los amigos se parecen a los árboles, cuanto más tiempo llevamos con ellos, más hondas son sus raíces y más numerosas las ramas de la amistad”.